amores cotidianos (124): momentos tiernos

Gary-Nikolai Angelov - Гари Николай Ангелов - 05

 

“Ella me daba la mano y no hacía falta nada más. Me alcanzaba para sentir que era bien acogido. Más que besarla, más que acostarnos juntos, más que ninguna otra cosa, ella me daba la mano y eso era amor”

(Mario Benedetti)

Ilustración de Gary-Nikolai Angelov

amores cotidianos (112): cuerpo y espíritu

Alex Alemany - 04

Tener sexo es bueno para el cuerpo…
Pero hacer el amor es bueno para el espíritu..!!

(Chiara Patty Donati)

“Se durmieron poco a poco, despertándose o semidespertándose sólo para sentirse confortados con la piel del otro, como si el simple tacto los pusiera a salvo de toda desgracia”

(Mario Benedetti)

Ilustración de Alex Alemany

Poemas íntimos de Mario Benedetti.

Hay cosas demasiado dificiles; comerse un helado una tarde de agosto antes de que se derrita o elegir poemas de Mario Benedetti. Algunos de carácter más social ya los he publicitado en blocdejavier y otros irán apareciendo. Con su respectiva versión sonora ahí van estos cuatro:

Una mujer desnuda y en lo oscuro

Una mujer desnuda y en lo oscuro
tiene una claridad que nos alumbra
de modo que si ocurre un desconsuelo
un apagón o una noche sin luna
es conveniente y hasta imprescindible
tener a mano una mujer desnuda.

Una mujer desnuda y en lo oscuro
genera un resplandor que da confianza
entonces dominguea el almanaque
vibran en su rincón las telarañas
y los ojos felices y felinos
miran y de mirar nunca se cansan.

Una mujer desnuda y en lo oscuro
es una vocación para las manos
para los labios es casi un destino
y para el corazón un despilfarro
una mujer desnuda es un enigma
y siempre es una fiesta descifrarlo.

Una mujer desnuda y en lo oscuro
genera una luz propia y nos enciende
el cielo raso se convierte en cielo
y es una gloria no ser inocente
una mujer querida o vislumbrada
desbarata por una vez la muerte.

Táctica y estrategia

Mi táctica es
mirarte
aprender como sos
quererte como sos

mi táctica es
hablarte
y escucharte
construir con palabras
un puente indestructible

mi táctica es
quedarme en tu recuerdo
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
pero quedarme en vos

mi táctica es
ser franco
y saber que sos franca
y que no nos vendamos
simulacros
para que entre los dos
no haya telón
ni abismos

mi estrategia es
en cambio
más profunda y más
simple

mi estrategia es
que un día cualquiera
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
por fin me necesites.

Viceversa

Tengo miedo de verte
necesidad de verte
esperanza de verte
desazones de verte.
Tengo ganas de hallarte
preocupación de hallarte
certidumbre de hallarte
pobres dudas de hallarte.

Tengo urgencia de oírte
alegría de oírte
buena suerte de oírte
y temores de oírte.
o sea,
resumiendo
estoy jodido
y radiante
quizá más lo primero
que lo segundo
y también
viceversa.

Soledades

Ellos tienen razón
esa felicidad
al menos con mayúscula
no existe
ah pero si existiera con minúscula
seria semejante a nuestra breve
presoledad

después de la alegría viene la soledad
después de la plenitud viene la soledad
después del amor viene la soledad

ya se que es una pobre deformación
pero lo cierto es que en ese durable minuto
uno se siente
solo en el mundo

sin asideros
sin pretextos
sin abrazos
sin rencores
sin las cosas que unen o separan
y en es sola manera de estar solo
ni siquiera uno se apiada de uno mismo

los datos objetivos son como sigue

hay diez centímetros de silencio
entre tus manos y mis manos
una frontera de palabras no dichas
entre tus labios y mis labios
y algo que brilla así de triste
entre tus ojos y mis ojos

claro que la soledad no viene sola

si se mira por sobre el hombro mustio
de nuestras soledades
se vera un largo y compacto imposible
un sencillo respeto por terceros o cuartos
ese percance de ser buenagente

después de la alegría
después de la plenitud
después del amor
viene la soledad

conforme
pero
que vendrá después
de la soledad

a veces no me siento
tan solo
si imagino
mejor dicho si se
que mas allá de mi soledad
y de la tuya
otra vez estas vos
aunque sea preguntándote a solas
que vendrá después
de la soledad.

Ilustraciones, por este orden: Kiera Malone, Emilii Wilk,  Paul Knight ,  Modigliani – Cabeza de Jeanne Hébuterne ligeramente vuelta a la derecha- y Jared Joslin -Cafe-.

Mario Benedetti (1920-2009), escritor, ensayista y dramaturgo uruguayo cuya obra poética, en un estilo sencillo y directo -casi coloquial-, aborda una temática social sin renunciar al intimismo del amor. Su obra se hizo eco de la angustia y la esperanza de amplios sectores sociales por encontrar salidas socialistas a una América Latina subyugada por represiones militares.

Corazón coraza (I): el secreto de tu mirada, el misterio de tu alma

 ¿Es fría de corazón? ¿Desalmada? ¿Seductora? Cientos de poetas y hombres de letras han escrito sobre esta mujer y ninguno de ellos ha resuelto el enigma de su sonrisa, ninguno ha leído sus pensamientos

Porque te tengo y no
porque te pienso
porque la noche está de ojos abiertos
porque la noche pasa y digo amor
porque has venido a recoger tu imagen
y eres mejor que todas tus imágenes
porque eres linda desde el pie hasta el alma
porque eres buena desde el alma a mí
porque te escondes dulce en el orgullo
pequeña y dulce
corazón coraza

porque eres mía
porque no eres mía
porque te miro y muero
y peor que muero
si no te miro amor
si no te miro

porque tú siempre existes dondequiera
pero existes mejor donde te quiero
porque tu boca es sangre
y tienes frío
tengo que amarte amor
tengo que amarte
aunque esta herida duela como dos
aunque te busque y no te encuentre
y aunque
la noche pase y yo te tenga
y no.

Autor: Mario Benedetti

Ilustración: Leonardo da Vinci, “La Gioconda Mona Lisa” (1505)

Hay muchas versiones que circulan. Nada como la voz del propio poeta sobre fondo negro.

Del (puto) desempleo, las (dichosas) preferentes y los (malditos) recortes. Mala racha.

“Acá hay tres clases de gente: la que se mata trabajando, las que deberían trabajar y las que tendrían que matarse”

  (Mario Benedetti)

Ilustración: George  Grosz,  “unemployed” (1934) 

Ilustración: Emmanuel Garant, ” le pacte” 

“La contratación de las participaciones preferentes por parte de muchos ciudadanos se conseguía gracias a la combinación de dos elementos. Por un lado, el cliente confiaba en que el empleado de su banco, o caja, de toda la vida no iba a perjudicarle. Esa confianza se sitúa, pues, como un elemento clave. Por otro lado, se le ofrecía al cliente un caramelito que no podía obtener con otro tipo de depósitos: la rentabilidad. Y es que, es cierto, se trata de depósitos con una rentabilidad más alta que un depósito a plazo fijo normal, al menos durante el primer año. Si observamos la cuestión con toda la objetividad necesaria, debemos decir que los inversores ya entonces debían haber sospechado que un producto con tan alta rentabilidad, debía obligarles a correr un mayor riesgo, más con la que estaba cayendo en el sistema financiero europeo y mundial, por el clásico principio ibérico de que “no dan duros a cuatro pesetas”.

Y de nuevo hace acto de presencia la confianza, en el sentido de que el pequeño ahorrador incluso se sentía privilegiado por el hecho de que el empleado del banco le hiciese partícipe de tal producto, que seguro achacaba a la confianza recíproca que se tenían, y al interés del segundo por beneficiarle. A su vez, el empleado del banco también se llevaba su trocito de pastel, a través de las comisiones que recibía como premio a su productividad. Y todos contentos. Hasta ese aciago día en que el primer ahorrador quiere recuperar su dinero y le dicen que “vuelta usted mañana”, o “vuelva usted dentro de 99 años”, que en realidad lo que contrató fue un “producto financiero complejo y perpetuo, es decir, sin plazo de vencimiento determinado”, no un depósito a plazo fijo con una rentabilidad mayor a la acostumbrada, como creía”.

Fuente:

http://www.2aopinionjuridica.es/blogs/sonia-e-rodr%C3%ADguez-boente/la-honorabilidad-perdida-o-el-timo-de-la-estampita-sobre-preferentes

La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados”       (Groucho Marx) 

“El consenso ciudadano es mayoritario en que cualquier solución permanente a la crisis actual pasa por un proceso de ajustes y sacrificios que corrijan los desequilibrios acumulados en la época de la burbuja, pero ese consenso se rompe en mil pedazos con los métodos elegidos para repartir sus costes entre acreedores y deudores, entre pagadores (teóricos muchas veces) de impuestos y receptores de los servicios públicos que provee el Estado, entre ciudadanos de rentas altas, medias y bajas, entre los sectores económicos (financieros y productivos), entre las distintas zonas geográficas del país, entre los factores de producción (capital y trabajo), entre las generaciones (mayores y jóvenes), etcétera.

Ello es lo que explica la masiva manifestación del pasado sábado en Madrid: una mayoría no está de acuerdo en el reparto del ajuste.

Aunque se supone que las leyes en una democracia deben proteger a los débiles frente a los poderosos, a veces logran exactamente lo contrario y el efecto es una enorme transferencia de riqueza desde la parte baja y media hacia la alta.

Incluso en el que caso de que la mayor parte de estas reformas se desarrollara a un ritmo sin precedentes históricos, harían falta años antes de que hiciesen realidad sus beneficios. En la mejor de las hipótesis (que están bien diseñadas, lo que no ocurre con la laboral), estas reformas mejorarán el lado de la oferta. Pero hoy en día la debilidad de la economía española está en la ausencia de demanda; una reducción de los ingresos de los asalariados, sea a consecuencia de despedirlos, de bajar sus salarios, de reducir los servicios sociales (y que tengan que abonarlos),… disminuye la demanda total, reduce el crecimiento y debilita la capacidad de llevar a cabo las transformaciones estructurales que se precisarían”.

“La austeridad para pobres no solo es ineficaz para reducir el déficit y salir de la recesión, sino que obliga a pedir rescates. Y austeridad y rescates están causando una fatiga social que actúa como una termita, mina la cohesión y produce quebrantos políticos

La fatiga social se acentúa por el hecho de que, en su fórmula actual, la austeridad es equivalente a un impuesto oculto, que los Gobiernos recaudan sobre los ciudadanos de bajos y medianos ingresos para pagar el sobrecoste de la financiación a los prestamistas. De hecho, la cuantía de los recortes es de magnitud equivalente al aumento de los intereses que se pagan a los prestamistas. Este tipo de impuestos ocultos carecen de legitimidad moral y son muy cuestionados.

No estoy cuestionando la necesidad de lograr el equilibrio de las cuentas públicas, sino la forma en cómo se ha pretendido lograr. La fórmula de recortes de gastos sociales + reducciones salariales + reformas sociales es económicamente ineficaz, socialmente desigualitaria y políticamente perturbadora.”

Fuentes:

http://economia.elpais.com/economia/2012/09/16/actualidad/1347808984_275659.html

http://economia.elpais.com/economia/2012/09/14/actualidad/1347624775_668143.html

 El poder real es económico; entonces no tiene sentido hablar de democracia”      (José Saramago)

Y para acabar un relato breve de Eduardo Galeano que lleva por título “MALA RACHA”:

Mientras dura la mala racha pierdo todo. Se me caen las cosas de los bolsillos y de la memoria: pierdo llaves, lapiceros, dinero, documentos, nombres, caras, palabras. Yo no se si será gualicho de alguien que me quiere mal y me piensa peor, o pura casualidad, pero a veces el bajón demora en irse y yo ando de pérdida en pérdida, pierdo lo que encuentro, no encuentro lo que busco, y siento mucho miedo de que se me caiga la vida en alguna distracción.

Autor: Eduardo Galeano

Ilustración: Van Gogh, “anciano afligido” (1890)