Retratos de España (210): diario del confinamiento

“lo que probablemente él no sabe es que no daría yo por una tarde de fútbol en Sarriá con su mano alborotando mi pelo mientras festeja un gol de Esnaola en propia meta”

(Fragmento del relato “Tarde de fútbol en Sarriá”)

Se conocieron una verbena de Sant Joan; ella tenía quince años, él unos pocos más. Ella era la mayor de las tres hermanas de mi padre y mi abuelo un indiano del Penedés al que las finanzas se le fueron de las manos. Él uno de los tres varones de un comisario adicto al régimen en la España más negra. Tuvieron un noviazgo largo -en aquella posguerra de hambre ubérrima y sexo parvo- con dos mil quinientos cincuenta y cinco días y ninguna noche aunque luego se desquitaron en el seiscientos y Marlon Brando en Perpignan les instruyera en las utilidades de la mantequilla. No discutieron casi nunca de política; ella provenía de una familia catalanista y de izquierdas, él ni lo uno ni lo otro sino todo lo contrario.

Ella se llama Marta. Él, hasta ayer, se llamaba Antonio.

Han tenido tres hembras; Marta, Silvia y Virginia. Yo iba con él al fútbol algunos domingos de mi infancia. Mi madre siempre agradecía a mi tío Antonio que ofreciera sangre para un hermano mío que murió con cuarenta días en 1955, seis años antes de que yo naciera. Y también las gestiones del padre de Antonio para aliviar el encarcelamiento de dos hermanos de mi madre presos en el Castillo de Montjuic por rojos.

También le agradece, supongo, que intercediera para que me dieran trabajo en la multinacional donde él trabajaba, allá por el año 1985. Un año más tarde, con 58 años de edad, tuvo un ictus. Perdió el habla y la movilidad. Ha pasado así los últimos treinta y cuatro años de su existencia, mudo e impedido. Un tercio de su vida. Ayer tenía 93 años.

Marta, positiva y asintomática, recluida en su habitación del centro sanitario me recodaba hoy que yo era su sobrino favorito; tal vez el cuarto hijo -ese varón con el que los tradicionalistas como él sueñan-.

Estas son las exiguas exequias de esta pandemia.

Autor: Javier Solé, abril 2020

Más información:

https://fragmentsdevida.wordpress.com/2013/04/28/tarde-de-futbol-en-sarria/