Retratos de España (110): políticos y desempleo

Ben Fenske - 01Escucho a un político explicar
cómo cerrará una empresa
y dejará a mil doscientas personas en la calle.
Sus palabras hábiles, elegidas, complicadas y equívocas,
me hacen dudar sobre si cerrará la empresa
o nos está salvando la vida.
Pienso si yo seré capaz de decir a mis hijos,
con la misma habilidad,
que esta noche ya no hay nada que cenar
y que mañana se me termina el paro.

Autor: Begoña Abad

Ilustración de Ben Fenske

Retratos de España (107): los efectos de la reforma laboral

Un relato de Meri Pas Blaqnuer que lleva por título “LA SEMILLA DEL DIABLO”:

eric bowman 06

“Me llamo Laura. Hace bastantes años que acabé la carrera en la Universidad y no tengo trabajo.

Esta mañana estuve en una entrevista, en otra más de las cientos a las que acudo cada semana, cada mes, cada año.

Una reclutadora me mira de arriba a abajo y me pregunta sobre mi vida, sobre mis objetivos, sobre todo, sobre nada.

En su posición de técnica de RRHH me observa, me analiza, me estudia, escudriña mi vestimenta, proyecta sus ojeras sobre mi lasitud, sobre este desaliento que debe trapasar todas la mesas de los “recruiter/headhunter”.

En mi intento de tener una conversación alegre, distentida, con un lenguaje como el suyo, lleno de tópicos anglicismos irritantes, me embrollo, me desordeno, la cago.

Me revuelvo en el mullido asiento de Ikea bajo unos focos que me hacen lagrimear.

eric bowman 11Y entonces me pregunta si estaría dispuesta a trabajar también los fines de semana.

Y también me pregunta si estaría dispuesta a trabajar 9 horas seguidas descansando 10 minutos.

Y si estaría dispuesta a estar 15 días en un curso de formación sin remunerar.

Contemplo durante unos segundos sus párpados hinchados, su cuerpo enraizado al sillón, sus zapatos de tacón remachados en la grisácea moqueta y me voy, me largo, ahueco mis alas, todavía incólumes y me elevo surcando aquella empresa hedionda que me está asfixiando, donde mi sangre empieza a notar los efluvios del veneno.

En la calle, todo sigue igual, menos las nubes, siempre se mueven hacia adelante.”

Autor: Carmen Pascual (Meri Pas Blanquer)

Ilustraciones de Eric Bowman

Retratos de España (53): los mendigos del Siglo de Oro

Dos propuestas literarias bien distintas en torno a la mendicidad y la pobreza en la España que “remonta”. A Soledad Soler es probable le incomode –y lo comprendo- compartir con Pérez-Reverte pero la intensidad y sensibilidad de la andaluza es un contrapunto humanista imprescindible para sanear el azote fascista del laureado y académico e insensible escritor murciano al que el término solidaridad le parece marciano.

Primero lo chungo y luego la joya:

Czuko Williams 2013“Plaza del Callao, Madrid. Doce y media de la mañana. Tirado en el suelo sobre una manta y cartones, junto a un cochecito de niño cargado de paquetes y chismes, entorpeciendo el paso de la gente, un fulano barbudo, sucio, corpulento, está quitándose pelotillas de entre los dedos de los pies descalzos. La postura es de lo más relaxing cup de café con leche in Madrid, que diría la alcaldesa Ana Botella: tiene una pierna cruzada sobre otra -y quizá porque está tumbado al sol y hace calor- los pantalones bajados hasta las ingles, mostrando unas carnes mugrientas e hirsutas y unos calzoncillos de sospechosos tonos pardos. Al llegar a su altura, la peña se aparta con precaución, creándole en torno una pequeña tierra de nadie, un glacis en el que se ve un reguero de algo líquido que proviene del vivac callejero del fulano, ignoro si vino de un tetrabrik que figura entre sus posesiones o alguna clase de líquido de origen más personal y orgánico que, con tal de no levantarse, el individuo ha excretado directamente desde su cómodo apostadero.

Caminando unos pasos delante de mí, dos policías municipales, hombre y mujer, pasan ante la escena sin inmutarse, fijos los ojos en la lontananza, y se alejan entre la multitud, en absoluto dispuestos a complicarse la existencia, a que el fulano se rebote y les monte bronca, o a que quienes pasamos por allí -no sería la primera vez- los llamemos esbirros fascistas por meterse con un indefenso mendigo en pleno ejercicio de tal. En ese ámbito concreto, Madrid es una relaxing cup de hacer lo que te salga del ciruelo, les han recordado esta mañana en el Ayuntamiento antes de mandarlos de patrulla. Que así lo marcó con su estilo, en plan buen rollito y todos compadres, el ex alcalde Ruiz-Gallardón. Y ellos, claro, cumplen. A ver si no. Como cumplen sus colegas que miran al tendido, atentos a si un músico toca el violín sin pagar las tasas municipales o un taxista pisa la continua, mientras en las aceras los peatones zigzaguean entre muñones desnudos y perros drogados, y en los semáforos los coches esquivan a viejecitas encorvadas y tipos sin afeitar, jóvenes y absolutamente sanos, que limosnean en lenguas balcánicas, metiéndose entre los coches para que los atropelles y te busques la ruina mientras a ellos, con la oportuna indemnización, les solucionas la vida”

(Arturo Pérez Reverte, fragmento del artículo “Relaxing cup in Madrid” publicado en su blog en octubre 2013)

El relato de Soledad lleva por título “SIN PALABRAS“:Arriba Extraña

Llueve.

Miro por la ventana.

Veo a dos chicos que se pelean por llegar antes al contenedor de cartones.

Leo que las lágrimas tienen la misma cantidad de sodio que la sangre…

Fuente original: http://alaluzdesirio.blogspot.com.es/2013/10/sin-palabras.html

Fotografías: Czuko Williams y Víctor Aranda García

Retratos de España (47): seleccionar juguetes, despedir personas

Richard Baxter - 05Promovido por trabajadores de la televisión valenciana que se han visto afectados por un ERE y bajo la dirección de Alicia Puig este delicioso cortometraje confirma que la madre instruye a la hija pero si no se acostara tan pronto podría aprender mucho más de la niña:

las flores del mal

A Ricardo le fastidia esto de los días señalados, como el de Todos los Santos. Le parece hipócrita acordarse de las personas allegadas fallecidas sólo en determinadas circunstancias y en concretos momentos.

Luis Beltrán - 03Hay gente que para evitar el colapso en la peregrinación de noviembre a los cementerios portando flores a los muertos acude anticipadamente. Los hay, más tradicionales, que lo hacen puntualmente el mismo día de los difuntos. Ricardo ni lo uno ni lo otro; tiene tiempo y podría organizarse para evitar los momentos de mayor afluencia pero los últimos tres años ha descubierto que lo ideal es ir inmediatamente después de la fiesta; es entonces cuando en todo el cementerio luce el dispendio de centros de flores de miles de colores y las voces de los visitantes se han difuminado. Es ahora cuando Ricardo rebusca entre las flores más frescas descartadas en las papeleras del cementerio aquellas que depositará en la tumba de sus padres. Hace tres años que ni trabaja ni cobra el desempleo aunque ha podido entre las flores todavía no marchitas confeccionar a sus progenitores la ofrenda. A veces le da un toque elegante al ramo con flores que coge directamente de los nichos vecinos.

Es probable que dentro de dos años cobre un subsidio. Confía entonces en comprar en la floristería del cementerio un ramo de rosas rojas. Más que nada por dejar de sentirse mal. Los jesuitas le inculcaron un sentimiento de culpa del que ni toda la lucha de clases puede sustraerle.

Autor: Javier

Fotografía de Luis Beltrán 

Relato incluido en la versión impresa de “Rehén de la memoria” (ISBN 978-84-9050-719-3)

Retratos de España (26): el hombre invisible

“Cuando un hombre estúpido hace algo que le avergüenza.., siempre dice que cumple con su deber” (George Bernard Shaw)

rajoy cobarde“Un gobierno que exige fe en los sacrificios humanos como método para calmar la ira de los dioses está confundiendo la economía de mercado con la teología maya” (Felipe Benítez)

Retratos de España (17): Todos los días bajo la incesante lluvia

Se despiden trabajadores2013 (02) Bellvitge 01
Se alquilan locales
Se desalojan vecinos
Se venden sus pisos
Se compran voluntades
Se destruyen sueños.

Hay brotes verdes
Todo es mentira… salvo alguna cosa

Se matan personas.
Eso es cierto.

Autor: Javier

Fotografía del barrio de Bellvitge, L’Hospitalet LLobregat

PAGA

Paga el agua
paga el gassverre malling - 01
paga el teléfono
paga la casa
paga la electricidad
paga los impuestos
paga las multas
paga las tasas
paga los políticos
paga la cultura
paga la justicia
paga la sanidad
paga y paga todo
paga y paga sin parar
pero que te sobre algo
para que te puedan enterrar.

Autor: TORO SALVAJE

Ilustración de Sverre Malling

Fuente original:

http://torosalvaje.blogspot.com.es/2013/02/paga.html

el roto - apocalipsis inmobiliario

Retratos de España (12): el desempleo no hace ni puta gracia pero humor habrá que tener

Si pensáis que en las propuestas humorísticas que sobre el desempleo os traigo hay chirigota o irreverencia al abordar un tema tan “serio” recordar la reflexión de Nietzsche:

“La potencia intelectual de un hombre se mide por la dosis de humor que es capaz de utilizar”

La historia, en general, avanza poco y mal.

Un fantasma recorre Europa…

¡Arriba, parias de la Tierra!
¡En pie, famélica legión!

(Fragmento inicial de la Internacional)

 

“¿Quién se revela? ¿Quién se levanta en armas? El esclavo raramente, pero casi siempre el opresor convertido en esclavo”

(E. Cioran)

 

 “Todas las revoluciones modernas han concluido en un reforzamiento del poder del estado”.

(Albert Camus)

Un fantasma recorre Europa…

Hasta hace bien corto tiempo atrás era todo optimismo en Europa. Los ricos se hacían aún más ricos, las clases medias recibían beneficios materiales que les hacía sentirse conformes y tranquilos con el porvenir. La cosa iba viento en popa.

Y hasta los trabajadores, si bien estaban siempre amenazados por el paro, recibían algunas migajas mayores que en el pasado y pensaban con optimismo en casa propia, adecuados estudios para los hijos, vacaciones y hasta viajes. Y podían dormir tranquilos pensando en que un día descansarían y gozarían de la merecida jubilación para la cual habían contribuido durante tantos decenios. Era el reino eterno del “capitalismo de rostro humano”, del “capitalismo decente”.

Se diagnosticó un primer tumor maligno allá en el Wall Street, en los años 2007-2008. Atribuido a malas administraciones ajenas al neoliberalismo. El “tsunami” de la crisis arrasó con todo. Países enteros, economías hasta ayer proclamadas blindadas, y la economía de la mayoría del pueblo. Todos, salvos unos pocos, sintieron la crisis. Se hunden las economías, los estados y países se colocan al borde de la quiebra o están en quiebra técnica sostenidos con respiración artificial. Las cifras son demoledoras. Los volúmenes de deudas y de “necesidad de préstamos” son -de tan astronómicos- casi increíbles.

Durante un tiempo la gente corriente no lo entendió. Lo hizo cuando llegaron los desalojos y los echaron a la calle perdiendo vivienda y lo ya pagado por ella. Lo hizo cuando los echaron de los trabajos. Lo hizo cuando cayó sobre sus cabezas una lluvia ácida de prestaciones sociales y estatales que se suprimían para atajar la crisis.

Gobiernos ora de derechas ora socialdemócratas vadearon con el pueblo. Los estados mayores del sistema capitalista comprenden qué estas brutales medidas, este expolio al bienestar del pueblo quitándole techo, trabajo, ahorros, pensiones, salud y educación para sus hijos implica riesgos de las llamadas “explosiones sociales”.  Hoy existen millares de “trabajadores” desocupados, en algunos casos con ayudas estatales qué en este momento se ven gravemente amenazadas, y hay millones también de trabajadores por cuenta propia qué son un subproducto y qué están esclavizados el día entero persiguiendo algún trabajo, carentes de derechos y seguridades.

En consecuencia, la misma legión de famélicos deambula por las ruinas de Europa, por sus calles huecas, por sus desangelados polígonos industrialses; con la misma hambre de entonces y con la misma desolación en la mirada.

“Si el pueblo español se manifiesta pacíficamente, los gobernantes de turno no hacen caso de las reivindicaciones legítimas. La historia reciente nos lo ha demostrado multitud de veces. Si los ciudadanos recogen firmas para protestar contra cierta ley o impulsar determinada norma, los políticos hacen oídos sordos al clamor popular. Lo ratifican las hemerotecas. Si las personas tratan de hacerse oír en los medios de comunicación, con frecuencia sufren censura, al estar muchos de ellos al servicio de la ideología de algún partido político mayoritario. Si la gente trata de constituir algún partido político para hacer una sociedad más justa a través de las instituciones de representación popular, los partidos políticos mayoritarios endurecen la ley electoral y se aseguran de que los españoles quedan encarcelados en un bipartidismo de dudosos beneficios para el pueblo. Si los españoles votan para expresar quiénes quieren que les representen, solo lo hacen una vez cada cuatro años y se encuentran con listas cerradas y programas electorales que con frecuencia se incumplen. Dicho esto, y cuando ya hay en España millones de personas que pasan hambre porque Cáritas no da más de sí para cubrir unas necesidades que debería satisfacer el Estado (y no lo hace), ¿todavía hay quien se pregunta por qué la gente se ha convocado para rodear el Congreso? ¿Qué puede hacer el ciudadano común cuando ve que hay quien se dedica a todas horas a tratar de negarle la dignidad, la esperanza y el futuro? Queremos respuestas.”

(Gonzalo García: “Razones para rodear el Congreso”, publicado en el diario “El País” el 28/09/12)

“Al fin y al cabo, somos lo que hacemos para cambiar lo que somos”

(Eduardo Galeano)

Ilustraciones, por este orden:  Otto Griebel, “The International” (1930), Nicanor Piñale, “la pesadilla del burgués” y fotografía de Benito Ordóñez, “la libertad guiando al pueblo el 25 de septiembre”.