HOLODOMOR

No podré nunca escribir
vuestros nombres en la nieve.
Ni pronunciarlos en idish.
Quiebra mi desconsuelo
invocar nuestro paseo
por festivas y húmedas
calles estrechas de Odesa.
El címbalo y el violín.
Contrabajo y clarinete.
En bodas y funerales.
Los klezmorim de Moldavanka.
Ahora solo un óleo
en el shtetl de Chagall.
Soy el klezmer que errante
pregona vuestra memoria
por el bulevard de Paris.
Autor: Javier Solé
Ilustración de Marc Chagall
La música klezmer constituye un género musical étnico que procede de la tradición askenazí de Europa del Este. Surgió durante la Edad Media e integró diversas influencias procedentes de países tales como Rumanía, Grecia o Ucrania. Esta música se interpretaba como acompañamiento a la danza y a celebraciones sociales de todo tipo que incluían, por ejemplo, las bodas. Actualmente se conserva casi inalterada y todavía se interpreta en muchas partes del mundo. Entre otros instrumentos, los más utilizados en este género musical son el violín, el dulcémele, el clarinete o el acordeón.