El día que yo me mate
será con mala leche.
No usare ridículas cuchillas
de un bocado me abriré las venas
por paredes, techos y suelos
frotaré mis muñecas
tiñendo de muerte todos los rincones.
El día que yo me mate
será con dos pistolas
una en la boca, en la sien la otra
y a la de: ¡Que os den por el culo!
apretar con calma los gatillos.
El día que yo me mate
será desde las torres de La Redonda
saltaré como los toreros al ruedo
con los brazos abiertos
sin rezar “Padrenuestros”.
El día que yo me mate
me colgaré de los güevos
si con eso no basta
a lo tradicional: por el pescuezo.
El día que yo me mate
será con rabia y desprecio.
No dejaré notas estúpidas
justificaciones, ninguna.
Autor: Pepe Pereza
Fotografía de Noell S. Oszvald
Fuente original: http://pepepereza.blogspot.com.es/2013/09/poemas-cansados.html
EL POETA SUICIDA MIRA DE FRENTE LA MUERTE
La sala
medio llena
donde los acólitos
del poeta suicida
asisten a la presentación
del último poemario
de este excelso trovador.
Una madre colérica
irrumpe en el auditorio
descargando
todas las balas
del mismo revólver
con el que su hijo
se despojo ayer de la vida
enamorado del rapsoda
y embelesado por sus
elegías fúnebres.
En la mueca
del cuerpo sin pulso
del poeta suicida
no se dibuja gozo alguno
en su deseado encuentro con la Muerte,
sólo la desazón de saberse exánime
descubriendo ahora
lo falso que fueron todos sus poemas.
Autor: Javier Solé
Ilustración: Manet, “el suicida” (1880)
Del libro de poemas “La casa del silencio” (ISBN 978-84-9095-522-2)